-Cuánto tiempo sobra.
-Las sobras que el tiempo nos deja.
-Las sombras que el tiempo nos deja.
-Y las luces, ¡las luces!
-No, es de noche; las luces son naranjas y de alumbrado público.
-¿No te gusta que el asfalto crezca a cada segundo en la noche y se llene de gente que va como muerta? Hay algo de fantástico, de vivo ahí dentro.
-Hay cinismo, hay miedo, hay un nudo en el fondo de la garganta llagada.
-Pero ese mismo es el dolor que hace que la ciudad viva.
-Pero no vive.
10.3.09
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3 comentarios:
Vivitos y coleando, así se llamaba ese grupo de clowns alucinados. Hay miedo y nudos por ahí, pero tal vez podamos no hacer de esas cosas instituciones y podamos ir por ahí demoliendo hoteles, con menos preocupaciones, ocupándole la cancha a los desalmados.
detras de la colina sale el sol!,te espero en el camino verde(c.g)
Enorme!
Muchas gracias por este blog
Adriana
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